martes, 24 de marzo de 2015

El gran dilema de la transición corporal


Como en las teleseries o la publicidad en general, este título "le lleva" un slogan: "O el cómo explicarle al mundo que no puedo salir porque LA ROPA NO ME QUEDA BUENA!"; pues bien, así es, es un trauma, es un temazo!, es una gran preocupación y es en general una lata pero cuando pasan unas semanitas después del parto y notas que la guatita ya no existe (o queda muy poco de aquella eterna panza que no te permitía ni cortarte las uñas de los pies), te crees reina del mundo, te sientes más mina, te sientes mejor, sientes esa sensación que generalmente una no suele tener cuando va al gimnasio en varias semanas y los cambios son menores, porque acá el cambio es evidente y ese cambio te genera entre éxtasis y motivación (que creo, sólo sentirías después de una lipo).

Ahora bien, a pesar de esa tremensa sensación hay un problema que se oculta tras un pijama y que sale a la luz cuando deseas enfrentar al mundo con la ropa que usaste antes del embarazo: NADA TE QUEDA BUENO, ASÍ QUE DEBES ESPERAR...y ahora el problema mayor, cómo explicarle al resto de que no quieres salir a tomarte un helado, que no quieres ir a pagar una cuenta, menos ir a carretear y no es porque estés con leche hasta el cuello, ni que el niño te demande mucho, ni nada, sino que es porque no tienes ropa! así de simple, no hay ropa. Los pantalones no suben, con las poleras de pavilo pareces Marta Sánchez (muy antigua?, bueno, es la única mujer pechugona que se me vino a la mente), las faldas no cierran y las blusas no cruzan...todo mal...sin contar el tema que me encanta, la leche, porque más encima hay que tener ropa ad hoc para poder alimentar a tu crío así que las opciones que puedas seleccionar de tu closet se reducen considerablemente. Ah y otro detalle, las porquerías deben combinar así que otro filtro para lo que te puedas poner.

Así que ya saben, de verdad es un tema salir de la casa y si cuando nos van a visitar nos ven en pijama no es necesariamente porque tengamos depresión post parto ni esas cosas, es porque NO TENEMOS ROPA!


viernes, 20 de marzo de 2015

Beneficio para las madres afiliadas a la Caja de Compensación Los Andes


Les cuento que hoy realicé el cobro de un bono por natalidad en la Caja de compensación Los Andes, el cual consiste en un pago directo de $22.000.- por niño nacido. Para poder cobrarlo debes llevar a cualquier sucursal los siguientes documentos:

1.- Certificado de nacimiento del hijo (a).
2.- Certificado de permanencia laboral firmado por el empleador. Adjunto link: http://www.cajalosandes.cl/docs/default-source/educacion/formulario-de-certificado-permanencia.pdf?sfvrsn=0
3.- Cédula de identidad de beneficiario.

Cuando ingresas esos antecedentes además, se incluye la opción de que recibas en tu domicilio la "Primeca Caja" que consiste en una serie de productos para el bebé avaluados en $60.000.-

Agregando a lo anterior, una vez que pagues tu cuenta de parto la Caja de Compensación te bonifica con $100.000.- (una vez que operó el copago de Isapre o Fonasa), lo cual claramente ayuda muchísimo en este primer período donde notas que el dinero se hace agua.

Espero les sirva ese dato! Nunca está de más!


TOP FIVE: Regalos útiles a la madre y al recién nacido.



Puede ser que este listado se encuentre muy ligado a mi reciente puerperio, pero nunca está de más hacer un recuento de los mejores presentes que te puedan dar y que siempre agradecerás haber recibido:

1.- PAÑALES: Generalmente desde la talla pequeña en adelante, porque los de recién nacido duran poco y probablemente la madre ya asaltó el supermercado para conseguirlos.Los pañales son importantes ítems de gastos del presupuesto familiar así que si quieres llevar un buen regalo por las mismas lucas que comprarías flores o peluches, mejor elije pañales que nunca están de más.



2.- AMAPOLAS: Son demasiado útiles, las mejores amigas de una potencial madre productora de leche y de las cosas que una suele olvidar cuando se va al hospital. Pedirle a tu marido, hermano u otro que te vaya a comprar un paquete de amapolas a la farmacia es realmente dirigirlo a un océano de opciones que nunca apuntará así que si tienes alguna amiga, familiar o cercana que tuvo hace poco un bebé acuérdate de mi y cómprale amapolas, siempre te lo va a a agradecer.



3.- AGUA (sí, agua): Muchos hospitales o clínicas suelen dar litros y litros de agua a la madre para que pueda generar buena leche; sin embargo, esa agua nunca es suficiente así que si deseas llevar algo que realmente sea útil y que le genere un valor agregado a su estadía en el hospital, un litro o bidoncito de agua no falla.





4.- REVISTAS, SUDOKU, PUZZLES: Ustedes dirán: "pero si no tiene tiempo la madre, cómo va a a leer una revista o jugar?", pues bien, les cuento, SÍ TENEMOS TIEMPO! porque generalmente en el Hospital o Clínica, que es el caso que estamos relatando, a una la atienden en todo (cosa que no sucede en la casa) y si suponemos que todo salió bien y que la madre debe esperar al menos 48 hrs antes de que le puedan dar el alta, entonces no viene nada de mal algún artículo que nos permita recrear la vista o divertirnos por un momento.




5.- CHOCOLATES: Si sabes que a la madre le gusta el chocolate y no tuvo complicación alguna en el parto, entonces llévale un poquito de azúcar porque el menú del Hospital o de la Clínica es foooomeeee y le falta su toque dulzón.

De todos modos, recomiendo averiguar bien si la persona tiene algún problema con el azúcar o si derechamente no le gusta, la idea es llevarle algo que le encante, que no esté prohibido y que no tengan en el Hospital.




Algunos pormenores de la maternidad



Cuando te pregunta una persona que ni siquiera ha visto mudar a una guagua (como fue mi caso antes de tener a mi hijo), cuáles son los aspectos más complejos de la maternidad, las primeras 5 cosas que se me vienen a la mente son las siguientes:


  1. Estar en tu casa, en la micro, en el metro, en TODAS PARTES, con olor a leche. La lactancia materna es preciosa, sí, tener mucha leche para darle a tu bebé también (incluso se considera un milagro puesto que hay muchas mujeres que no logran tener leche suficiente), pero...vivir con olor a leche y que el resto lo huela sin entender la procedencia de ese olor, ufff es difícil, te sientes sucia y es hasta poco atractivo (según una).
  2. Lograr salir de la puerta de tu casa con el niño (o los niños) perfectamente arreglados y tu medianamente decente es casi imposible...realmente admiro aquellas mujeres que se ven muy seguras de sí mismas, sin los pantalones marcados con zapatitos ni con alguna prenda arrugada por un forcejeo a última hora con su retoño y sin rastros de transpiración en su cara, porque de verdad, es una lucha cuerpo a cuerpo con tu hijo el poder dejarlo impecable para una ocasión y de paso, lograr que en esa lucha tu ropa y tu look perdure. 
  3. Lograr estar un par de horas en cualquier sitio (volviendo al tema de la leche), sin que te duelan tus bubbies. Les cuento, una vez fui a Lollapalooza cuando mi primer hijo tenía 4 meses de nacido y de verdad fue un caos!, sentía que se me afiebraba todo, no podía concentrarme, transpiraba helado y notaba cómo poco a poco mis senos se transformaban en verdaderas rocas! Nooo mal!
  4. Lograr un look adecuado para la ocasión (y volvemos a la leche) que te permita amamantar a tu bebé sin tener que sacarte toda la ropa! Porque nos queremos ver bonitas a pesar del olor, el sudor y demases, pero por Dios que cuesta encontrar ropa que te guste, no tan cara y que te permita dar leche y participar del evento tranquilamente...porque de otro modo, estás obligada a permanecer encerrada en la pieza de tu amiga (o de quien sea), dando leche a tu hijo y sin poder seguir el hilo de ninguna conversación, sin conocer las copuchas, en fin...mal otra vez!
  5. Saber que en unos pocos meses más tienes que volver a trabajar :(
Esas son las que se me vinieron primero a la mente y no crean que tengo una fobia a la leche, al contrario, amo el amamantamiento, pero de que es incómodo, lo es! 

Hay muchísimos aspectos más que se nos pueden ocurrir pero por ahora ese es mi top five, quizás más adelante le haga algunas modificaciones.


jueves, 19 de marzo de 2015

Ser mamá a los 30!!!



Suena curioso estar escribiendo bajo el título "Ser mamá a los 30" cuando recuerdo como si fuese ayer mi período en el Liceo de Niñas de San Bernardo donde lo más común era ser madre a los 15 y probablemente a esta edad (30), esas madres se encuentran ya curtidas en el arte de la crianza y ya no lidian quizás con pañales o cólicos, sino que con trastornos psicológicos pre adolescentes.

Pero el título quizás en otra época, como la descrita, pueda resultar poco llamativa o trivial pero ahora, en el mundo que me rodea, tener un hijo (o dos en mi caso) sin haber cumplido treinta años es realmente un suicidio profesional; me explico, mis pares están hablando otros temas, qué magister tomarán, dónde saldrán a "comer" (porque para salir a bailar no da el cuero!) y los más "estables" se están comprometiendo para el matrimonio pero siempre dejando en claro que la maternidad o paternidad según el caso, estaría relegado a un período posterior de sus vidas porque "hay muchas cosas que quedan por vivir".

Este blog se basa principalmente en la idea de acompañar a mujeres profesionales y trabajadoras, que dejaron en cierto aspecto su "éxito profesional y personal" a un costado (o pendiente) y que disfrutan (o sufren) el día a día de como menciona el slogan de una marca de pañales "una vida caóticamente hermosa".

De todos modos, hay ciertos clichés que no comparto y que a lo largo de este blog iré derribando, porque no por ser madres somos peores trabajadoras ni por ser amante de nuestros hijos, malas amigas.

Calculo del subsidio maternal especial, cuando estas cesante, Parte II.

Lo prometido es deuda, y no hay plazo que no se cumpla. Vengo a explicar lo difícil del calculo del subsidio maternal cuando estas cesa...