Cómo optimizar el uso de los medicamentos

Si te es familiar la palabra Ibuprofeno, Salbutamol, Diclofenaco o Loratadina, entonces este post te puede interesar.

Quienes tenemos más de un hijo o quien está iniciando el proceso de la maternidad sabe que dentro del corto plazo nuestro bebé tendrá que recurrir a un sinnúmero de principios activos por haber adquirido alguna enfermedad propia de la edad como bronquitis, gripe o por haberse contagiado con un virus como enterovirus, adenovirus entre otros que general un malestar en nuestros niños y que si no son tratadas con cuidado pueden mutar a una enfermedad peor como la temina bronconeumonia por ejemplo.

Pues bien, el primer semestre de nacimiento de nuestro bebé nos es familiar lidiar con cajas y cajas de medicamentos, algunos a medio terminar u otros prácticamente sin usar, pero en resumen, el botiquín familiar no da abasto y pueden pasar un tiempo o años ( como en mi caso), y el sector del botiquín pasa en cierto aspecto al olvido dado que sólo lo vamos rellenando pero no sabemos realmente qué habita en él. Por lo anterior, decidí hacer un trabajo de joyería que quisiera compartir con ustedes, con el fin de que se puedan relacionar de forma más fluida con los medicamentos que se encuentran en el hogar, llegando al esperado momento en que saben: qué hay, para qué sirve y cuándo va a vencer.

Para ello, les propongo que en primer lugar realicen una agrupación de todos y cada uno de los remedios que hay en el hogar sin discriminar: cremas, gotas, supositorios, pastillas, etc.

Segundo, en una bolsa de basura depositen todo lo que haya expirado a la fecha de revisión y en este item hay que ser bien sinceros. No piensen que los medicamentos tienen fecha de vencimiento como en las comidas pero que esa fecha en verdad no cuenta porque son productos "no perecibles"; pues acá es más serio, sí o sí deben desechar aquello que se encuentre fuera de su fecha.

En tercer lugar, en un cuaderno anoten un listado agregando cada producto, lo mínimo es que ingresen los siguientes datos: nombre comercial, principio activo, fecha de expiración. Muchos medicamentos se van a repetir pero ojo: revisen las fechas de vencimiento de cada uno de esos productos porque pueden variar sus periodos de expiración así que no se fien que caducan en la misma fecha porque no tiene por qué ser así.

Luego, ese listado copienlo para que lo puedan tener en sitios donde les sea fácil de acceder pero principalmente y aquí lo bueno de este sistema, lleven una copia de ese listado actualizado en el cuaderno pediátrico del bebé porque así, en caso que el médico prescriba algún fármaco a su hijo le puedes mostrar el listado y él podrá adaptarse a uno que ya tengas en uso o sin abrir. Importante es en este punto que no es obligatorio para el médico prescribir algo que tengas en tu hogar pero si él conoce con lo que cuentas puede que flexibilice su opción.

Por último, no está demás siempre conocer qué tienes en tu botiquín para no caer en duplicidad de compras; a su vez, actualizar cada dos meses tu listado y tu botiquín te puede ayudar a ir revisando lo que haya o no expirado y así evitar externalidades negativas derivadas del uso de un medicamento vencido.
Si eres de esas buenas buenas amigas que no sabe en qué contribuir para aliviar la carga de una mamá, pues asumir la responsabilidad de organizar la despensa de medicamentos es una excelente idea.

Espero les haya servido este dato.

Saludos!